03 septiembre 2007

Mis vacaciones o cómo visitar Irlanda en unas pocas líneas (1ª parte)

Sí amigos, al fin he vuelto de mis merecidas, y nunca suficientemente largas, vacaciones estivales. La bella y verde Irlanda fue el destino escogido para solazarme con mi estimada Subcomandante.

Aterrizamos en Dublín y sin salir del aeropuerto alquilamos un minúsculo automóvil (tuvimos que sentar las maletas en el asiento de atrás y meter el neceser en el maletero). Ni que decir tiene que conducir por la izquierda tiene miga, sobre todo el primer día, el segundo eres el rey y el tercero echas a los irlandeses a la cuneta, jeje; eso sí, son conductores amabilísimos, no pitan, ceden el paso y no te pegan el morro a la parte de atrás.

Las carreteras, por el contrario, son horribles, pero con el encanto de que ovejitas y vacas te contemplan (son tan respetuosas que ni siquiera invaden la calzada). Kilkenny fue la primera parada, un pueblecito mediano con encanto. La siguiente fue Galway, hermosa ciudad que celebraba sus races en aquellas fechas, con lo que las señoras (léase jovencitas) iban todas de punta en blanco, tocadas con sombreros que no desentonarían en Ascot, y los señores, como no, ataviados con el sempiterno traje. Allí visitamos los espectaculares acantilados de Moher y zarpamos hacia las islas de Arán, enclave mágico, y aislado hasta hace escasas décadas, donde los halla.

Contaba Synge en su libro Las islas de Arán (que un día reseñaré ¡hay que documentarse amigos antes de partir!) que cuando alguien enfermaba solían acudir el médico y el cura, porque no sabían si podría zarpar si el clima empeoraba. Allí, obviamente, sobrevivimos a una suerte de diluvio en miniatura y gozamos de un pub típico con musica en directo (como todos los pubs de Irlanda), pero con la peculiaridad de que aquí el tiempo sí parecía haberse detenido, y nos acercamos a la casa construida por el equipo de Flaherty, cuando rodó Hombres de Arán. Por cierto, en esta zona hablan gaélico, cosa que hace que su inglés sea mucho más neutro y comprensible, porque eso sí, los irlandeses no hablan nada de castellano (ni de cualquier otro idioma), puesto que no les interesa lo más mínimo lo que pase más allá de sus fronteras (los diarios, todos sensacionalistas, sólo recogen noticias propias, a lo sumo, alguna referencia a la guerra de Irak cuando caía algún soldado inglés).

[Continuará...]

16 comentarios:

Zelig dijo...

Mañana les cuento el resto, que además ya lo tengo escrito, así que seguro que actualizao, jeje.

Anónimo dijo...

qué envidia, no tengo yo ganas de conocer irlanda ni ná.
ya que paso por aquí quiero recomendar "dos días en París" la opera prima de Julie Depy, que es una comedia estupendísima con unos diálogos descacharrantes. tiene un par de altibajos, pero aún así merece la pena. respecto al partenaire de la delpy, recuerdo haberlo visto en un par de capítulos de friends con una redecilla en la cabeza y pensar "pedazo de actor de comedia"

Anónimo dijo...

un par de preguntas abuela-style:
- ¿qué tal tiempo os hizo?
- ¿Qué tal os dieron de comer?

Zelig dijo...

La verdad es que la peli de nuestra amiga Julie no me llama mucho, claro que si usted la recomienda, la tendré en cuenta.

Lo que sí hice hace años fue asistir a un concierto de la señorita Delpy en el Primavera Sound, lo calificaría de regular, casi ni me acuerdo.

Por cierto, sus dos preguntas abueleras se responderan en el post de mañana.

Anónimo dijo...

Bah, yo de esto ya lo sé todo, qué poco interesante el post...

Zelig dijo...

Jeje, qué egocéntrico es usted, ¿pretende que le haga el blog a medida? Si tiene alguna sugerencia, anótela y prometo tratarla en la próxima entrada.

Anónimo dijo...

Fíjense que una compañera mía de trabajo le ha puesto Aran a su recién nacida hija. Le digo: ¡ah, qué bonito, como las islas de Aran! A lo que me responde: Pues no sabía que existían, más que nada se lo hemos puesto por la sonoridad, porque no hay niñas que se llamen así y si me apuras... por el valle. Moraleja: si no hay pasta para ir a Irlanda, siempre nos queda el Pirineu.

Zelig dijo...

Menos mal que no le gustaba como sonaba chimpón, sino vete a saber.

Creo que un día le comenté a usted señorita Bronski que Arán proviene del vasco, que se hablaba siglos ha en aquella región, y significa "valle", así que realmente ése es el nombre que esta señora le ha puesto a su hija. Cuénteselo a ver qué le parece.

Anónimo dijo...

valle como la imbécil aquella de compañeros....Otro dia le hago la sugerencia sr zelig, aunque apunte que versará sobre la reproducción del esquimal cojiciego en captividad

Anónimo dijo...

sra bárbara, ese buen actor es Adam Goldberg si no me equivoco, el que hacía de soldado judío en salvar al soldado Ryan, y sí, es muy aprovechable...(en Joey tp estaba mal)

markcohen dijo...

Yo únicamente conocía el nombre bíblico de "Aram", pero es masculino.

Y bueno "La Valle" aka "La Santolaria" dicen que ha aprendido a interpretar... pero yo no me lo acabo de creer, aunque ahora esté con la garrula aquella de la Carmen Machi en el Borrás haciendo una presunta "comedia".

Zelig dijo...

Vaya no pensaba que la Santolaria despertara tanta inquina, yo la verdad nunca me había planteado si era buena actriz o no, o si tan siquiera lo era. De hecho, tampoco vi nunca "Compañeros".

Y sí, la Machi es algo garrula.

Anónimo dijo...

Creo que os equivocais con la MAchi, de hecho yo me he quedado parado al escucharla alguna vez...no la confundamos con Aida...Santolaria es una cutre huesuda que va de guapa

Anónimo dijo...

Queridos todos, 'Auto', que se ve en el Teatre Borràs de Barcelona desde ayer es una obra de Ernesto Caballero, una especie de reformulación sobre el auto sacramental... No sé si en clave comedia, la verdad. Carmen Machi fue alumna de la primera promoción del Teatro de la Abadía (creado y dirigido por José Luis Gómez)y ha interpretado a Shakespeare, Valle-Inclán...

Zelig dijo...

Si ha sido alumna de José Luis Gómez habrá que tenerla un respeto. En este caso, que haya interpretado o no a Shakespeare es secundario.

Anónimo dijo...

menuda veleta el sr Zelig!! Fuera!!