05 noviembre 2006

Viendo El laberinto del fauno (2006) de Guillermo del Toro y Scoop (2006) de Woody Allen

De Guillermo del Toro había visto anteriormente El espinazo del diablo y Cronos, la segunda apenas la recuerdo, tuvo bastante éxito en su momento como cinta de gran imaginación hecha con pocos medios, pero me pareció que no había para tanto, y la de El espinazo la verdad es que me aburrió de lo lindo. Con El laberinto del fauno me ha pasado algo parecido, no me ha seducido. Hay que decir que Sergi López como malo malísimo está estupendo y la niña y la Verdú se pueden soportar, ahora bien Ariadna Gil, y ya lleva unas cuantas, está para matarla y la historia en sí, más allá de la anécdota, no me interesó.

Me pareció que las dos tramas: la de la niña y sus faunos y la de Sergi López y la Gil no tienen punto de unión. Del Toro parece decir: voy a hacer una película sobre los duros años de la posguerra (vaya usted a saber por qué le interesa tanto este período histórico) y introduciré una historia fantástica de una niña que es una princesa, etc. Ya, muy bien, tienes mucha imaginación tio, pero las historias no casan, no basta con hacer dos historias paralelas con un leve nexo, hay que integrarlas. Sí, los "monstruos" están muy logrados y visualmente es impactante, pero el filme se queda ahí, en la anécdota. Bien es cierto, que al subcomandante Mofletes le entusiasmó, así que presumo que es un filme que tendrá críticas dispares.

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Creo que lo he dicho aquí alguna vez, pero es algo que vengo defendiendo desde hace tiempo, Woody Allen no había sabido envejecer su personaje, le sobra talento a raudales y por eso es capaz de hacer siempre grandes películas, pero su personaje ya no resultaba creíble como seductor de jovencitas (aunque en la vida real pueda serlo, ya se sabe que la realidad supera a la ficción). Bien, pues en Scoop parece que lo ha comprendido, si unos filmes atrás hubiera hecho que la Johansson se enamorase de él, aquí hace de su supuesto padre. El filme es divertidísimo. Ojo, no es ni Manhattan ni Annie Hall, y tampoco es una obra maestra como lo es Match Point; lo digo, porque aunque yo no las he leído, ya me han prevenido de ciertas críticas que dicen que Scoop no está a la altura de ésta. Eso es cierto, pero aún así es un filme divertidísimo, de lo mejorcito de Allen en los últimos años.

La Scarlett, a parte de preciosa claro, está fantástica; el periodista fantasma y Hugh Jackman lo mismo, y como no, Allen, el gran Splendini, mucho más. Impagable como mago, como médium del más allá y, sobre todo, relacionándose con la alta burguesía inglesa. El filme tiene referencias surrealistas, fellinianas e incluso se puede ver a la muerte (¿homenaje bergmaniano a El séptimo sello?) conduciendo una barcaza. Para colmo, en el filme Allen dice cuál es la religión que profesa que, casualidades de la vida, es la mía: el narcisismo. En fin, véanla: "les quiero, son ustedes un público encantador, un ejemplo para su raza".

15 comentarios:

Mario dijo...

Con "Cronos" pasó algo muy curioso en México en su momento: fue la abanderada de lo que se dió en llamar "el nuevo cine mexicano". En aquel momento la producción de pelis era muy raquítica, y fue casi un milagro que un joven cineasta de Guadalajara hiciera con tan pocos recursos una obra tan personal (la reelaboración de la imaginería católica) y de tan buena factura. Como dices, no es una obra maestra, pero si tiene momentos de genio. En particular me acuerdo de dos: cuando el vampiro en que se convierte Federico Luppi acaba hurgando en sus propias entrañas, y el final que es muy parecido al de "El laberinto...", una suerte de sagrada familia que es como estampita religiosa. Lo curioso es que hoy cineastas jóvenes a principios de los 90's, como Del Toro y Cuarón, todos han tenido que salir fuera de México para poder seguir haciendo cine. Como decía Ripstein, en México hay un género que es el cine de opera prima, pues abundan los directores que nunca más vuelven a rodar... Y yo soy como tú en mi narcicismo: disfruto la peli anual de Woody Allen, aunque sé que no se puede hacer una obra maestra tan fácil como pelar patatas, y más lo haré con "Scoop", que está a punto de estrenarse en la Ciudad de México y tiene tu aval...

Anónimo dijo...

Hablando de Federico Luppi, ¿no os parece que siempre hace la misma peli? El otro día le vi en la peli esta del boxeo -no recuerdo el título, sí esa en la que sale Coronado- y me pareció el típico papelito secundario que siempre hace.

Zelig dijo...

Sabia frase la de Ripstein y no le debe faltar razón, aquí pasa algo parecido, pero en honor a la verdad son pocas las operas primas que valen la pena, no andamos sobrados de talento.

Sip, Mario, el día que nos falte el tio Woody lo echaremos muucho de menos.

Zelig dijo...

Querida Bronski esa peli del boxeo de la que hablas no la he visto. Creo que Luppi es un grande, pero como está tan de moda todo el mundo le quiere, aunque, bien es cierto, que tiene un estatus como para permitirse según qué cosas.

En "El laberinto del fauno" creo que sobra, no tiene sentido que haga ese papel, ahí o le das un personaje importante o nada. De hecho, creo que saca a cualquiera de la historia, dices vaya tela si resulta que el ... es Federico Luppi. Te quedas con la anécdota, es como lo de Marlon Brando con "Supermán" pero ahí el personaje está al principio y luego te centras en la peli, aquí es al revés.

Anónimo dijo...

pues a mi guillermo del toro me cae bien aunque no haya visto muchas de las peliculas de su filmografia. A raiz de las criticas a Blade II dijo algo así como: "que carajo quieren que haga blade en la pelicula, ponerse a leer a Proust alli en medio?? es blade, coño, así k agarren unas palomitas y no piensen más en la pelicula". Las cosas claras.

Zelig dijo...

Jeje, muy buena la frase de Del Toro, ahí le doy la razón.

Claro que ¿por qué no podría un vampiro leer a Proust? Yo lo hago...

Anónimo dijo...

otro personaje imbuido por anne rice o elizabeth kostova...flipaos...

Anónimo dijo...

Pues a mi me gustó la del laberinto, a ver, entretenida. Ahora, eso si, que mal me cae Ariadna Gil! Yo no sé que le ven.

Zelig dijo...

Sip, querida mofletes, hasta que no se quite ese extreñimiento crónico la Gil va a ser muy difícil que nadie se la crea.

Anónimo dijo...

Yo también creo que es más sosaina que una reunión de diabéticos

Zelig dijo...

Bueno, veo que nuestro periódica lapidación de miembros de la farándula ha caído esta vez sobre la pobre de Ariadna Gil. Enhorabuena a los premiados.

Anónimo dijo...

Estimado Zelig,
acudí con las reservas ya predicadas ante usted al último estreno del gran Woody, aunque por otra parte manajeba una critica positiva leida en su blog dias atrás. Y siento decirle que como antaño sucedia, pero al revés, volvemos a no coincidir. La pelicula es de las flojitas, flojitas de verdad del gran Allen, apenas cuatro risas difuminadas, alguna gracieta y poco más que recordar...Creo que me reí algo más en la del escorpión de jade. Estamos de acuerdo eso si en que Scarlett sale muy guapa y en que Woody ya ha dado un paso atrás en lo de ser el macho seductor del film, aunque lo deberia haber dado ya hace unos 20 años o así. Pero otra cosa me chirría sobremanera: tal como pasó con Branagh (quien le ha visto y quien le ve), will ferrell o jason biggs, la que hace en este caso de personaje genuinamente Allen es Johansson, con un alarde de tics y frases inacabadas como el gran Woody hacia antaño. Es decir la actriz lo suplanta o complementa en esta peli. Vaya, debe ser un guiño a Freud, con un yo y un super-yo en escena a la vez.
Ah, lo de la barca en plan divina comedia está muy bien.
Aqui lo dejo k no tengo más tiempo.

Zelig dijo...

Bueno, estamos en desacuerdo sobre la valoración final del filme, pero estoy de acuerdo en su reflexión sobre la señorita Johannson, Allen siempre hace de Allen y sino está él alguien hace de él, eso es lo que llaman cine de autor. Y puestos a pedir quién mejor que la señorita Johannson para que lo suplante, n'est pas?

Anónimo dijo...

Puestos a elegir yo no pediria k la srta Johansson me suplantara precisamente...

Zelig dijo...

Yo tampoco quisiera que le suplantara a usted la señorita Johannson, perdería todo su encanto, jeje.